DE FONDO
Fernando Díaz de León Cardona
Tiene razón el gobernador José Ricardo Gallardo Cardona, en que es muy prematuro hablar de la sucesión gubernamental en tanto que todavía falta mucho y aún ni siquiera cruzamos el cuarto año de gobierno.
No obstante, no es ocurrencia de los medios o de algunos acelerados en lo específico, sino de encuestas que mes a mes informan en las redes sociales del comportamiento electoral del estado. Ovio que existe algún interés.
De que son encuestas bien hechas, lo son. Están perfectamente vinculadas a la realidad política que se percibe y se observa. Claro que también esas mediciones cuestan, – y mucho y, – alguien las paga como elemento de evidencia o como traje a la medida.
Mes a mes, la empresa Demoscopía Digital publica en redes sociales las tendencias sobre probables alianzas, candidatos, preferencias, gusto y conocimiento sobre las y los aspirantes a la gubernatura que habrá de renovarse en 2027.
La información revelada en las encuestas mensuales es muy sugerente, pero generan la sospecha de que no están todas y todos los que son, ni están todos los que deberían estar, – o bien, aparecen los que ni remotamente o por accidente podrían no tener alguna posibilidad de alcanzar la candidatura.
De entrada, una eventual alianza entre MORENA-PVEM-PT la vuelve invencible al alcanzar un 47.2 % de las preferencias. A la probable alianza PAN-PRI le conceden un 20.4 % y al PMC un 7.1 %. De ser así, un resultado estaría anticipadamente cantado.
Donde la puerca tuerce el rabo, es que, si cada partido va solo, el PVEM lograría un 25.2 %; MORENA un 19.8 %; el PAN un 16.4 %; el MC un 9.2 %; el PRI un 7.1 % y el PT un 3.9%.
En un escenario así, una hipotética alianza entre PAN-PRI-PMC podría alcanzar un 34.7 %. En esta ruta, con cualquier partido que el PAN establezca una alianza, si es con el PRI o con el MC, Acción Nacional estaría en condiciones de lograr un empate técnico con el PVEM, le ganaría a MORENA y las cosas; entonces sí, se pondrían calientes o muy cabronas.
Las sugerentes encuestas, no dan margen a la duda. O van juntos MORENA-PVEM y PT o corren el riesgo de una elección complicada y, – si el candidato de la coalición PAN-MC y probablemente del PRI, sea Enrique Galindo Ceballos, pues peor aún para la alianza de la 4T.
Aun cuando el PRI no hiciera alianza con el PAN o que no apoyara a Galindo, con todo y ello alcanzarían el empate técnico. A menos que el PRI amarre con el Verde, entonces los porcentajes variarían. Lo malo para el PVEM es que su discurso se mantiene encendido con la llamada “herencia maldita”, proveniente principalmente del PRI.
En cuanto a los reactivos relacionados sobre conocimiento y gusto de la población monitoreada, sobre quienes tienen mayores posibilidades están: Por el PVEM, al exalcalde Ricardo Gallardo Juárez, lo conoce o han oído hablar de él un 62.6 %, sin embargo, solo un 14.7 % opina que le gustaría que fuera el candidato a gobernador.
En este apartado, la senadora Ruth González Silva se posiciona con un 23.1 % y José Guadalupe Torres Sánchez con un 11.8 %.
En MORENA, a Juan Ramiro Robledo lo conocen o han oído hablar de él un 21.6 %, pero a solo un 7.9 % le gustaría que fuera gobernador. En este mismo partido, Cuahutli Badillo, logra un 9.5 % pero Rita Ozalia Rodríguez, se lo lleva con un 15.9 %.
Por el lado de las mujeres, de la Secretaria de Gobernación, Rosa Isela Rodríguez, un 30.4 % dice conocerla pero a un 18.3 % le gustaría que fuera la candidata a gobernadora, es decir, que está muy por encima de Rita, Juan Ramiro y de Badillo. Habría que esperar que decide la presidenta Sheinbaum.
En el PAN, según Demoscopía Digital, las mujeres van mano en cuanto a conocimiento. La senadora suplente Estela Arriaga tiene un 31.6 % contra un 30.3 % que tiene la senadora Verónica Rodríguez.
Ahora bien, a la población encuestada le gustaría que fuera gobernadora Verónica Rodríguez con un 20.8 %. A un 18.4 % le gustaría que fuera Estela Arriaga, y un 18.2 % que fuera Raúl Ortega que, junto con Rubén Guajardo, huele que están más direccionados a la presidencia municipal capitalina y no tanto para la gubernatura.
En el muy particular caso de MORENA, habría que esperar a ver que decide la dirigencia nacional respecto a la no reelección, sobre el nepotismo y los trota cargos para 2027. Todos, en cada partido quieren, pero en MORENA habrá reglas según sus estatutos o decisiones que vienen de mero arriba.
El resto de los partidos hacen su talacha y día a día refuerzan sus estructuras, realizan sus amarres y están a la espera de las decisiones. Que, si algunos se verán mal queriendo jugar, como lo dijo la presidenta, pues si, pero en política todo es predecible y nada es imposible.
El Pollo la está jugando bien y será un hueso difícil de roer. Él está pensando más allá del 2027 y el proyecto sigue su curso. Solo tiene que cumplir con los compromisos pactados porque si no lo hace le irá como a danzante de pueblo en feria.
Ya lo dijimos, San Luis Potosí no será una prioridad para el centro. Lo será Nuevo León y Chihuahua, ya lo veremos.
Hasta pronto