El como por el que, la clave para seleccionar buenos alcaldes.
Toño Martinez
Cómo podremos tener la certeza, el tino y la seguridad de encontrar candidatos confiables a presidente municipal entre el agobiante bombardeo de promesas, frases, canciones y poses sonrientes en lonas, volantes y espectaculares que no son sino elementos de mercadotecnia que hasta los aspirantes ignoran, al grado de llegsr a preguntar a su equipo de imagen ¿ Eso dije yo… cuando? …pero me gusta así déjalo, está fregon”.
Difícil verdad?. porque muchos de esos mensajes son falsos y están diseñados para crearnos la idea subliminal de que por esa persona debemos de votar.
Se apropian psicológicamente de nuestro razonamiento y pensamiento cognitivo y ya ven, terminamos eligiendo a quien llega a ser un verdadero bodrio para gobernar, con visión miope y van otros tres años de progreso mínimo o atraso para el pueblo.
Entonces como blindarnos contra candidatos que son “mucho ruido y pocas nueces”?.
Lo primero es darnos un tiempecito aunque para indagar quienes son, actividad a la que se dedican, de dónde provienen sus ingresos, su familia, amigos, trayectoria laboral y de servicio social
Saber sus antecedentes, gustos, valores y principios demostrables y hasta si profesan alguna religión.
Dirán que es muy difícil.y tardado pero no; ahora con las tecnologías de la información y el órgano de transparencia es posible encontrar la semblanza de sus vidas.
Algo fundamental además para el análisis de confiabilidad de un aspirante es que digan no lo que quieren hacer sino como lo van a hacer.
Prometer es hasta un deporte, es fácil, todos los hacen pero sustentar un.plan de trabajo sustentable es otra cosa.
El como en lugar del que es el mejor escaneo y ultrasonido que podemos hacer para diagnosticar quien pueda ser buen alcalde, respetable, responsable, entrón,, capaz de establecer alianzas con el pueblo sin pedantería ni actitud soberbia.
El 2 de Junio.o nos damos la oportunidad de forjar una ruta segura de ascenso en todos los órdenes para el pueblo, o seguimos igual.
