El gol de Ferran Torres, segundo para el Barcelona, cayó cuando un defensa del Mallorca estaba derribado en el área, pero el árbitro lo dio por válido.
El Barcelona inició su defensa del título de LaLiga con una goleada 0-3 en Mallorca y una acción polémica, ya que el segundo gol cayó cuando un jugador local estaba tirado en la cancha, algo que el árbitro ignoró y dejó correr la jugada.
La visita a el Estadio de Son Moix comenzó con un dominio del Barcelona, que se adelantó temprano en el marcador con un gol de Raphinha a pase de Lamine Yamal en el minuto 7.
Pero luego el juego entró en un ritmo intenso y frenético que dejó varias jugadas polémicas. La primera fue la que precedió el 0-2.
En el minuto 23, Lamine Yamal disparó a gol, pero el defensa Antonio Raíllo despejó con la cabeza y cayó al césped. El árbitro se llevó el silbato a la boca, pero nunca detuvo la jugada, por lo que el único que siguió compitiendo fue Ferran Torres, que tomó el balón y lo clavó en el ángulo. La realidad es que el golpe no fue tan potente, razón por la que el árbitro no consideró detener el juego.
Pese a las protestas locales, el gol contó y el juego continuó.
Sin embargo, el Mallorca perdió la concentración y sufrió dos expulsiones en seis minutos. Manu Morlanes (33’) y Vedat Muriqi (39’) dejaron en desventaja a su equipo.
Lo curioso fue que el Barcelona también bajó su intensidad y en el resto del partido estuvo cerca de aumentar su ventaja.
Fue un buen debut para Joan García como portero titular del Barcelona, mientras Marcus Rashford entró en la recta final, sin mucha oportunidad para lucir.
